LA METAMORFOSIS - Rafael León Dieguez
Una mañana al despertar de un sueño agitado, Rafael se encontró
convertido en lo que alguna vez fue su lecho, o mejor dicho en su propia cama. Era
como si su cuerpo lo hubiera absorbido y transformado en ella.
No parecía preocupado o alterado. No había ningún indicio
en su rostro de que lo estuviera, o mejor dicho no tenía rostro. A fin de cuentas era una cama, como si
pudiera tener uno. No se puede decir que estaba incomodo porque no se movía. No
se podría decir que le costaba respirar ya que no tenía pulmones. ¿Cómo
expresar alguna molestia o necesidad sin un cuerpo que respondiera a sus exigencias?
Ahora Rafa solo era una
simple cama. ¿Qué pasaría ahora?
Ya no se juntara con
sus amigos, no podrá ir a la escuela, algo que parece más positivo que un
problema. Ni siquiera va a poder sacar a pasear su perro. La mayor parte del
tiempo se la pasaba durmiendo, no hacía otra cosa. Pareciera que no tuviera obligaciones
o ambiciones que seguir, solo se recostaba encima de ese colchón de goma espuma
a relajarse luego de un duro día en el colegio. Pero bueno ahora ya nada
importa, ahora solo es una simple cama, o eso por lo menos será así hasta que
el sueño termine.
Buena historia, aunque los errores de expresión deslucen el producto final. Queda pendiente la elaboración del discurso.
ResponderEliminarMomentos en que el relato desconcierta (es muy corto, así los errores se destacan) y se torna confuso:
-"solo se recostaba encima de ese colchón de goma espuma a relajarse luego de un duro día en el colegio."
-"eso por lo menos será así hasta que el sueño termine."
Rever párrafos, tiempos verbales, algún error de concordancia.
NOTA: 6