Poemas - Octavio Hermida
Uno, disfrutar lo que queda
Dos, no perder de vista los objetivos
Tres, buscar el amor
Cuatro, que todo valga la pena
Cinco, salir con mi rancho
Seis, llegar a lo mas alto
Siete, descansar ocho horas diarias
Ocho, tocar el saxo
Nueve, comer pastas con boloñesa
Diez, vivir
Pongo todo lo que puedo, en este lugar
con el secreto deseo de que algún día
llegue la persona indicada
y me invite a bailar
y en lugar de ver solo a un loco
entienda todo mi pesar
Ningún padre en mi vida
Me pudo explicar
Que no todo se logra
Con solo buscar
Que, aunque le pongas tu sangre
Puede nunca llegar
Y cagarte la vida
Por no saberlo explicar
Un instrumento
de sonido magistral
destaca
en el coro
de instrumentos
mediocres
un instrumento
mediocre
se pierde
ante el coro
del instrumento
magistral
En el poco tiempo que te tengo
Arrancamos a cada momento
De a poco te fuiste perdiendo
Y en el estuche te quedaste quieto
Pero cuando vuelvo a hacerte vibrar
La casa haces temblar
La perra empieza a ladrar
Y el mundo te escucha cantar.
Últimamente perdí toda mi potencia
Potencia que tenía hace años
Pero que de a poco se viene esfumando
La prendo y la prendo
Pero se me apaga en las manos
Donde deja un lugar, ya ocupado
Por la desesperación imponente
Del sueño olvidado.
Yo solo quiero
decirte una cosa
Cuando te siento sin ropa
Mi cabeza se aloca
Y cuando te veo marcharte
El corazón se me explota.
Espero conseguir, algo en mi camino
Que logre devolver todo mi tiempo perdido
Que logre encarar a mi diablo encarnado
Que logre recordar las cosas olvidadas
Que logre corregir las relaciones embarradas
Que logre crear los inventos dejados
que logre darme paz
y no dejarme en mil años.
Pongo estos seis objetivos en mi cabeza
con el deseo secreto de que algún día
sean escuchados por la gente
y se conviertan en anécdotas
se conviertan en relatos
de la vida de alguien.
Todavía tengo casi todos mis años
casi todo mi tiempo, pero poquísimas ganas
puedo hacer las cosas que venía disfrutando
sentirme especial en donde me manejo
y correr cuarenta años detrás del sueño
o sea que no debería sentirme triste
pero el grave problema es que ahora
me planteo que estoy haciendo.
No te rindas, aún tienes tiempo
de alcanzar el objetivo y levantarte del suelo,
cargar tus derrotas, enterrar tus remordimientos,
liberar los fantasmas y olvidarte del resto.
No lo dejes, que el camino es este,
continuar el esfuerzo,
perseguir el sueño,
disfrutar el tiempo
y sonreírle al cielo.
veo el amor escondido en tu orgullo
cerrándote en capas, perdiéndote solo en tu barullo.
Veo en tu boca las palabras que nunca dijiste
Esperando que las extirpen como a un quiste.
No puedo corregirte
Pero puedo acompañarte.
Y siempre estaré esperándote.
Cuando menos lo esperaba
cuando poco a poco me retiraba
llego el llamado que mas esperaba
aquel que indicaba
que la batalla había sido ganada
y que dentro de una semana
en el pecho la iba a tener pegada
La semana pasada
no pude creer donde estaba parado
después de siete años
encontré lo que buscaba.
Por fin lo había logrado
llegar a la celeste y blanca
gritar todos juntos las palabras
abrazados como una manada
Algunas veces hay que
parar y mirar,
mirarse al espejo
ver tu camino
ver tu sombra
ver tus logros
ver tus fallos
y disfrutar de la vida
porque es una vista única.
Hiciste un buen trabajo, porque hay textos distintos entre sí e interesantes, algunos más logrados que otros, pero todos provocadores de una idea. sin embargo, queda pendiente el trabajo sobre la intencionalidad estética del lenguaje, una elaboración más cuidadosa del discurso. Rever el ritmo, la selección de vocabulario, los juegos sonoros (no sólo y necesariamente la rima), el uso polisémico de las palabras.
ResponderEliminarGracias por la capacidad de hurgar sentidos, la aventura sobre el papel y un libro que te llevás como testimonio de este momento en que jugamos a ser poetas.
NOTA: 7
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